Perfil del autodignóstico de competencias docentes
- Pablo Partida Gómez
- 23 jun 2021
- 2 Min. de lectura
Actualizado: 8 jun 2023


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Perfil de diagnóstico de competencia docente 2023

Reflexión sobre mi perfil de autodiagnóstico
de competencias docentes
Este ha sido mi tercer año como docente dentro de la Universidad de Montemorelos; mi tarea se ha desenvuelto en medio de un escenario desafiante que nadie imaginó debido a la pandemia. Sin embargo, al hacer una reflexión de mi perfil de autodiagnóstico de competencias docentes, he observado que a pesar de las condiciones adversas que imperaron en mi ambiente pude dar un paso importante en mi crecimiento profesional (Véase el cuadro de autodiagnóstico), sobre todo en las tres áreas que desempeño: investigación, profesor, mentor y tutor.
En el área de investigación enfrente un cambió sustancial, de una investigación cuantitativa me dirigí a una investigación documental, bíblica y exegética. Esto se debió al cambio de mi programa de estudios. Anteriormente inicié con el programa doctoral en Teología pastoral. Actualmente estoy aplicando para el programa doctoral en Nuevo Testamento por parte del SETAI, por consiguiente, mi investigación es bíblica y teológica. Gracias a ello, he aprendido a cómo iniciar una investigación de este tipo y a conocer su metodología; este proceso lo he disfrutado mucho y quizá por eso se refleja en mi perfil de autodiagnóstico (C1, C2). La Pandemia me dio un poco más de tiempo para investigar, debido a que no sufría tantas interrupciones. No obstante, el mayor desafío que actualmente es tener tiempo para seguir investigando en los siguientes años. La investigación requieren horas de inversión y muchas veces el trabajo como profesor es muy demandante, sobre todo porque durante el año escolar también sigo estudiando para aplicar al doctorado.
En la dimensión de profesor he aprendido a planificar mis clases gracias a la plataforma e42. Poco a poco implementé varias estrategias de enseñanza de forma más efectiva y de acorde a mi personalidad. Trató hasta donde puedo de que mis clases sean muy visuales y participativas (Véase C5). Sin ninguna duda hay mucho todavía que debo hacer, sin embargo, creo que la formación de un docente es un proceso que lleva tiempo y mi meta es dar un paso pequeño hacia adelante cada día. Esto también lo confirma mi perfil( C3).
En la dimensión tutoría y mentoría, la pandemia me facilitó tener un mayor acercamiento con los jóvenes mediante el uso del teléfono celular y entrevistas personalizadas por medio Zoom. Gracias a estas herramientas tecnológicas la consejería y la asesoría no cesó a pesar de la pandemia. El sistema híbrido me ayudo a tener una conexión cercana con los estudiantes presenciales y usar la tecnología para estar cerca de aquellos que estaban lejos.El perfil también ha reflejado esto y mi compromiso es seguir evaluando, corrigiendo y mejorando mi desempeño.
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